domingo, 25 de abril de 2021

Planes of Fame Air Museum (II de XI)

 


Nada más entrar en el Museo nos encontramos con el Hangar "Edward T. Maloney".




(Réplica del Wright 1903 Hitty Flyer construida en 1950-53 con motivo del 50º aniversario del vuelo de los hermanos Wright)


En él nos esperan algunos ejemplares muy especiales en un estado magnífico, se diría que recién salidos de fábrica.Por lo general alberga algunos más de los que aquí os muestro, pero éste es un espacio que se utiliza para actos y eventos de todo tipo y parecía que estaban preparando alguno ya que habían instalado sillas y mesas y habían movido algunos ejemplares a otros lugares del Museo.

- Lo primero que me encuentro es un ejemplar muy especial para mí. Se trata del Boeing P-26A Peashooter (N3378G) que pude contemplar en estática y vuelo en Duxford (Inglaterra) durante el Flying Legends del año 2014 en lo que fue seguramente la primera ocasión en la cual este magnífico ejemplar (el primer caza del mundo construido enteramente en metal) pudo ser visto en Europa. Un ejemplar con c/n: 1899 que sirvió en el Cuerpo Aéreo del Ejército de los Estados Unidos y posteriormente en la Fuerza Aérea de Guatemala, siendo recuperado en 1957. El "Planes of Fame Air Museum" es su casa y digamos que he podido cerrar el círculo con esta visita.






Imágenes tomadas en el Flying Legends del año 2014:




- El siguiente avión es un ejemplar de la versión E del Boeing P-12 (N3360G), él último de los cazas biplanos del Cuerpo Aéreo del Ejército de los Estados Unidos. El aparato del Museo es uno de los pocos ejemplares que quedan de los 135 fabricados.



- Para finalizar la estancia en este Hangar, nos deleitamos con la observación del Boeing FB-5 Hawk (A-7104), superviviente de los 27 de esta versión fabricados y que en su primer vuelo lo hicieron sirviendo para la Armada en su primer portaaviones, el USS Langley. En total, del Caza Biplano Monoplaza Boeing FB se fabricaron unos 160 ejemplares.





sábado, 17 de abril de 2021

Planes of Fame Air Museum (I de XI)


Como ya os comenté en la anterior tanda de entradas dedicas al "Yanks Air Museum", en el aeropuerto de Chino (California) existe un auténtico paraíso para el aficionado a la Aviación ya que en pocos metros pueden visitarte el Museo antes citado y el "Planes of Fame Air Museum" al que ahora voy a dedicar un buen número de entradas relativas a la visita que realicé en el año 2017.


En esta instalación podemos contemplar alrededor de 150 espectaculares aeronaves con modelos únicos y famosos en el mundo entero. Y no es una afirmación baladí, ya lo podréis comprobar a lo largo de mi relato.


Muchas de esas aeronaves están en estado de vuelo y cuando hay oportunidad de verlas en su medio natural con algunas de ellas será la única posibilidad de hacerlo ya que no es nada fácil (mejor dicho: muy difícil) mantenerlas en esa condición y sólo está al alcance de muy pocas Instituciones presumir de tener esa capacidad.


Este Museo fue fundado por Edward T. Maloney con la firme idea de salvaguardar para la Historia aeronaves míticas que tras el fin de la Segunda Guerra Mundial estaba predestinadas al desguace.


Un dato espectacular es que más de 50 de ellas pueden volar y así lo hacen en diversas exhibiciones en los Estados Unidos e incluso alguna de ellas en otros continentes, como ya os relataré más adelante.


El bronco sonido del motor de un P-40 nos recibe a la entrada.



Al fondo del pasillo nos encontramos la taquilla y tienda de regalos. Imposible pasar de largo ante tanta "tentación".



El Museo tienes varias zonas expositivas diferenciadas o Hangares. Repasaré mediante esa división lo mucho y bueno que el Planes of Fame Air Museum tiene guardado para el visitante. 


Como botón de muestra,entre otros,  nos perderemos por el apabullante "Jet Hangar & Air Races":



Nos quedaremos boquiabiertos en el "Foreign Hangar":


Disfrutaremos de la elegancia y estilo del "Pond Hangar":


Y pasearemos entre viejos guerreros en la "Zona exterior":



Un MUSEO así, en mayúsculas, con ejemplares míticos de un valor histórico incalculable y lleno de cientos de detalles particulares que lo convierten en una de las mecas para el aficionado. Su fama le precede, y es comprensible.