Cada día amanece.

A nadie se le escapa que el año 2020 ha sido complicado, muy complicado y que sus consecuencias van a perdurar durante bastante más tiempo que su duración cronológica.

Se ha sufrido mucho durante esos aciagos días por todo nuestro planeta y nuestra especie ha sido sometida, una vez más, a una dolorosa prueba que demuestra que nuestra existencia no es sencilla y exige su tributo a lo largo de la Historia.

Pero tras cada golpe , tras cada embestida del destino, nos hemos ido haciendo más fuertes, más longevos y firmes ante las adversidades. También se aprende de los malos momentos y estas enseñanzas, por duras que puedan ser, como especie suponen mayor capacidad de supervivencia futura. 

Muchas personas queridas y allegadas nos han dejado y bastantes más lo seguirán haciendo en los próximos meses por los efectos de la pandemia que nos afecta y también por los diversos avatares, accidentes, conflictos y enfermedades que indefectiblemente nos aquejan, pero el mundo gira y, aunque es poco lo que desde esta humilde ventana a este mundo que compartimos pueda expresar para intentar reconfortar aunque sea mínimamente tanto sufrimiento padecido, seguimos orbitando nuestra pequeña estrella en esta aún más minúscula esfera azul y cada día amanece de las sombras y nos ilumina la esperanza de un futuro mejor, o así me gusta pensarlo.

En estos días que en tiempos "habituales" suelen ser jornadas de fiesta, diversión y reencuentro familiares hemos de ser cautos y responsables porque esa actitud es la promesa de que volveremos más pronto que tarde a reencontrarnos con todos los nuestros como en Navidades anteriores.

Felices Fiestas y mucha Salud a todos. Cuidaos para cuidar a los demás. Y mucho ánimo.