Una vez que en la primera entrada he creído que era conveniente mostrar algunos detalles generales de lo que supone visitar Japón por primera vez, ha llegado el momento de dedicarse al spotting puro y duro en lo que concierne a su práctica en el Aeropuerto de Narita.
Como ya os comenté, Narita es uno de los dos aeropuertos internacionales de Tokio junto con el de Haneda, por supuesto sin dejar de lado los vuelos domésticos que también operan aquí en gran número y las operaciones de carga que igualmente suponen un elevado porcentaje de tráfico.
En el año 2018 más de 42.000.000 millones de pasajeros pasaron por sus instalaciones generando más de 255.000 movimientos de aeronaves, muy alejado eso sí de las cifras que genera Haneda. Este último es uno de los aeropuertos del mundo con más pasajeros, aunque en su momento ya daremos un vistazo a este otro "monstruo" aeroportuario.
Por supuesto, todos estos números se mantienen gracias a una logística espectacular como corresponde a un aeropuerto de su tamaño.
Para recoger o dar salida a tantos viajeros Narita posee dos pistas, siendo una de ellas de las de mayor longitud de Japón.
Pero sin duda y ya centrándonos en la práctica fotográfica podemos decir que aquí los spotters son más que bienvenidos, son agasajados con dos regalos espectaculares. Por un lado con una maravillosa terraza mirador instalada en el Techo de la Terminal 1 en lo que se considera el punto de observación oficial y en el que disfrutan fotógrafos, aficionados, familias y curiosos en general.
Esta terraza (que según la información oficial puede estar cerrada por condiciones meteorológicas adversas u otro tipo de problemas) tiene una enorme longitud y nos permite contemplar los movimientos de la pista 16R/34L y las operaciones en plataforma casi, casi pegados a las aeronaves. Tiene servicios de todo tipo (restaurantes, máquinas expendedoras, baños, bancos para sentarse...) y a través de su valla se pueden hacer fotos con teleobjetivo sin problemas. Una maravilla. Añadir también que para llegar hasta ella se pasa al lado de la tienda del Museo de Ciencias Aeronáuticas que está muy cerca del aeropuerto. Durante mi viaje pude visitar este museo del cual os ofreceré algunas imágenes en otro reportaje.
Asimismo, me llamó la atención el hecho de que en esta Terminal había instalado un gran número de placas fotovoltaicas con las lógicas intenciones de aprovechar esta energía ecológica para un mejor aprovechamiento de los recursos naturales, una filosofía muy común en este país.
El otro regalo consiste también en otra terraza mirador ubicada encima de la Terminal 2. Ésta es de dimensiones más modestas pero también consta de Baños y máquinas expendedoras. La valla es más tupida pero hay agujeros especiales en las mismas para poder fotografiar.
Las dos terrazas se complementan perfectamente ya que la instalada en el Terminal 1 es perfecta para fotografiar desde la mañana hasta la mediodía y la de la Terminal 2 es ideal para la tarde, en las fechas de mi viaje. Para desplazarnos de una a otra podemos utilizar los autobuses lanzaderas gratuitos del aeropuerto.
Como veis, Narita es un maravilloso destino para practicar el spotting. Lo recomiendo sin ninguna duda, es una de las mejores experiencias que se puede disfrutar en este mundillo. En las próximas entradas veremos que compañías y aeronaves podemos "llevarnos" para nuestra colección.
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