En fechas recientes se ha producido un accidente aéreo en una zona montañosa al este de Stavanger (Noruega).
En principio, aún no se conocen las causas del siniestro (se especula con la formación de hielo en las alas), pero el aparato cayo desde casi 3.000 metros de altura. Los equipos de rescate enviados a la zona comprobaron que sus cuatro ocupantes se encontraban ilesos y el aparato en casi perfecto estado.
Un accidente de este tipo es mortal en todos los casos, bueno, en todos los casos menos en este.
Y es que no hablamos de un aparato normal, se trata de un Cirrus S-20 dotado de paracaídas balístico que le permite afrontar accidentes de esta índole con una alta probabilidad de salvación.
Esta dotada de este tipo de sistemas de supervivencia fabricados por BRS Aerospace y, concretamente este modelo, fue la primera en contar con dicha equipación. Toda la linea de Cirrus cuenta con este "seguro de vida" que también es susceptible de montarse en otros modelos como en los Cessna 172, 182 o 162.
El despliegue del paracaídas comienza con la detonación de un cohete de combustible solido que tira del paracaídas y lo extiende en segundos.
Dicho despliegue suele producir graves daños al aparato, pero esto queda minimizado gracias a la salvaguarda de las vidas humanas que permite el dotarse de este sistema.
(Fotos: Wikipedia)
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